Nombre común:
Galápago de Florida
Filo: Chordata
Clase: Sauropsida
Orden: Testudines
Familia: Emydidae
Género: Trachemys
Especie: Trachemys scripta elegans
Como
expliqué en una de las entradas anteriores unas de las principales causas de la
pérdida de diversidad biológica en el mundo, es a causa de las especies
exóticas invasoras (EEI). En la entrada sobre EEI hable de la presencia en
Palencia de la hierba de la Pampa, en este caso la entrada es sobre el galápago
de Florida.
Se
trata de un galápago de tamaño mediano, que es fácilmente reconocible por la
mancha de color rojo que tiene a ambos lados de la cabeza. Esta especie es
nativa de México y EEUU. Siendo nativa de estos países, cómo ha llegado a ser
considerada una EEI en nuestro país por el Real Decreto 63/2013. La respuesta a
la gran expansión de ésta especie en España se debe a la continua liberación de
individuos, pero quién suelta a estos ejemplares, la respuesta es muy sencilla,
las personas que compraron a este animal como mascota, o sencillamente se han
cansado de él o se ha hecho demasiado grande. En este caso la mejor idea, nótese
la ironía, es ir y soltarlo al río de nuestra localidad, estanque, fuente…
Gracias a todas estas ideas actualmente esta especie se puede observar en todo
tipos de agua dulce, tanto naturales como artificiales, y está presenta en las
17 comunidades autónomas de nuestro país. También aparece en el puesto 17 del
TOP 20, que se trata de una lista con las 20 especies exóticas invasoras más
dañinas presentadas en España, creada en el año 2006, por lo que puede llegar a
estar algo desfasada.
En
los 90 ésta especie comenzó a venderse masivamente en España a bajo coste, un
reclamo para la población infantil, junto a la publicidad que hacía ver que el
animal no tenía gran necesidad, lo que no se mencionaba, eran sus
características vitales, su longevidad y el gran tamaño que pueden llegar a
tener. Consecuencias que llevaron después al abandono de éste animal en el
medio natural.
Desde
1997 se encuentra prohibida su importación a la Unión Europea. Pero debido a
que durante años se han estado liberando
ejemplares en el entorno natural, más su rápida adaptación al medio, y su
reproducción en libertad, hacen que se le otorgue el carácter de especie
invasora.
Fotografía de
Galápago de Florida Trachemys scripta elegans
La
problemática del galápago de Florida radica en su competencia con galápagos
autóctonos ibéricos (Mauremys leprosa) y el galápago europeo
(Emys orbicularis). Ya que en
comparativa el galápago de Florida alcanza tallas superiores, tiene una mayor
descendencia, una madurez sexual más temprana y para rematar una mejor
adaptación a todo tipo de ambientes debido a su dieta más variada y su alta
capacidad de soportar los ambientes contaminados como con presencia humana,
condiciones que los galápagos autóctonos no toleran. Por lo tanto éste no tiene
nada que hacer contra el invasor. Pero los daños en nuestros ecosistemas no
radican únicamente en la competencia con los galápagos autóctonos, sino que
también depredan sobre una gran variedad de animales, desde invertebrados a
todo tipo de pequeños vertebrados. Además afectan a los hábitats, ya que
provocan alteraciones en la estructura de la vegetación, o en la abundancia
relativa de especies nativas.
A
día de hoy, se ven en la mayoría de tiendas de animales tortugas pequeñas
parecidas a la especie tratada en esta entrada, se puede llegar a pensar que se
encuentra bajo un ilegalidad, cabe destacar que en el Real Decreto 630/2013
aparece la especie Trachemys scripta.
Es de entender que aunque la comercialización de esta especie está
tremendamente prohibida, y constituye un delito por el código penal, se siguen
comercializando especies similares por lo que se deduce que tengan el mismo
potencial invasor que el galápago de Florida. Pero por desgracia en este país
sólo se actúa cuando el daño ya está hecho.
Después
de explicar éste caso, de cómo un pequeño animal de compañía se convirtió en
uno de los grandes invasores de nuestro país, espero que aquel que lea este
blog y posea una pequeña tortuguita, jamás piense que la mejor idea es la de
soltarla en el río o charca más cercana.
Que buen artículo Laura, no puedo estar más acuerdo en todo. Saludos desde Cantabria.
ResponderEliminarmuchas grcias, es terrible que por el abandono de mascotas se lleguen a ocasionar invasiones, otro caso es el de las cotorras argentinas que tantos perjucios estan ocasionando sobre las aves de nuestras regiones.
Eliminarun saludo desde Leon